El pueblito y otras cosas: Gabriela Margall en Tandil

Huellas y secretos

Pepa, una de las protagonistas, portadora de historias ancestrales, transmitidas de generación en generación, nos remonta a principios del siglo XIX.

Conservadora de la memoria familiar nos introduce en

la vida de una tribu de indios pampas, de la cual es descen

diente.

"Como quien desgrana las cuentas de un rosario", Pepa

le relatará a Emma lo que esta última convertirá en una no

vela, salpicada con hechos históricos del siglo SXIX al XXI.

En un grato devenir, no carente de secretos a develar.

La autora nos traslada a la vida cotidiana del indígena de

las pampas, con toda la bravura y ternura que, como en todo hombre, conviven en él.

El Puente de Laura

Un ir y venir del siglo XIX al XIX atravesando los avatares de dos mujeres unidas por un secreto: Libia conocedora del pasado y Laura en una búsqueda constante por alcanzar el conocimiento de esa mujer que vivió dos siglos antes.

En ese continuo transportase de un siglo a otro, ambas vivirán situaciones que darán origen a un gran número de anécdotas, al que se suma el interesante conocimiento de las costumbres del siglo XIX, quedando así configurado un atrayente juego donde se funden el realismo, lo fantástico y lo histórico.

El lugar equivocado

Una casona ubicada en un distinguido barrio de Bs. As. Ha pertenecido por tres generaciones a la familia. Un ambiente confortable y lujoso que, por el sólo hecho de serlo, pareciera asegurar la felidad. Pero el pasado irrumplirá en la vida de sus ocupantes. Y en ese presente, alguno de los habitantes de la gran casona se preguntará si está en el lugar correcto.
La autora recorrerá dos épocas de nuestra historia, hasta conjugarlas en un presente.
Surgirá un claro juego de apariencia y realidad que, Manu, para algunos apenas una empleada de la casona, armonizará con la ternura de su sencillez.

El Pueblito

Amor por "El pueblito" y la nostalgia de haberlo dejado atrás, inspiraron las páginas, de mi primer libro. Dice la contratapa: "Un caserío encajonado no sólo por el riachuelo y el terraplén, sino también por los terrenos baldíos que la circindaban. Y, sin embargo, a sólo cuatro cuadras, la avenida Mitre, y a escasos metros la estación Sarandí... No hay en estas letras un decir amargo sino, por el contrario, la evocación de los momentos gratos. En ese anecdotario de recuerdos convergen: la infancia, la familia, los amigos y las costumbres de una época que ha quedado atrás"

Sirva esto como adelanto de sobre qué trata este libro que es el primero que publiqué

El pueblito y otras cosas

miércoles, 31 de julio de 2013

Gabriela Margall en Tandil

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